WESTWORLD
El desierto, trenes infinitos, una tierra en la que dar la espalda significa la muerte. El hombre sin nombre regresa a ajustar cuentas, tiene dos armas, con una resuelve problemas y con la otra los crea.
En el espacio nadie puede oír tus gritos, pasillos oscuros y claustrofóbicos, el terror acecha en cada esquina. Un viejo explorador espacial que sale a por tabaco y quizá no vuelva.
El invierno eterno, bosques altos como el cielo, un mal antiguo que ha despertado. Un impulsivo samurai-punk quiere crear su leyenda destruyendo otra. ¿Estará preparado?
Westworld es todo eso, un homenaje a las películas y dibujos animados de aventuras, acción y venganza y también un exorcismo para dejar salir esas obsesiones infantiles con humor y mucho amor. Es también la historia de un proyecto destinado a acabar en un cajón, un vídeo montado para una canción que no pudo ver la luz. Hasta que hablamos con Raphael della Ghetto y Vinnie Lenoir de Mama Leone y vimos que teníamos una oportunidad. A partir de un vídeo montado y acabado e inspirado en la banda sonora original de Future World (1976) de Fred Karlin, la secuela de la película Westworld, han podido componer una canción que encaja como anillo al dedo con la animación, It is Impossible to describa lo emocionante que fue ver un antiguo trabajo cobrar vida y mejorar por completo.
DISEÑO
La base de este trabajo fueron los personajes, por lo tanto, durante el proceso de diseño de personajes creamos logotipos para cada uno de ellos que fueran representativos y definieran los colores tanto del personaje como de su entorno.
FINAL FRAMES
Un rápido vistazo al video a través de los styleframes que hicimos para el proyecto.
ESCENARIOS
Dedicamos mucho tiempo a desarrollar los fondos: un tren que atraviesa el desierto, un castillo escondido en un bosque invernal y un planeta-nave espacial.
MONTAJE
El trabajo de edición es otro de los protagonistas de este proyecto, sobre todo al final, todo se vuelve frenético y era importante mantener el sentido de la narrativa además de hacer parecer que nuestros protagonistas «colaboraban» para solucionar su problema particular.